La cultura Nazca fue descubierta por el arqueólogo alemán Max Uhle en el año 1901, quien es considerado el padre de la arqueología científica peruana. Sin embargo, hablar de la cultura Nazca es hablar de María Reiche Neuman, también conocida como “La dama del desierto”. A continuación, te contaremos más sobre ella.
Biografía de María Reiche: la dama del desierto
Reiche nació el 15 de mayo de 1903 en Dresde, Alemania. Allí estudio Matemática, Física y Geografía. En 1932 llegó al Perú y se dedicó a trabajar como profesora particular de los hijos del cónsul de Alemania en Cusco. Sin embargo, desde aquel entonces, ya era una apasionada lectora de los cronistas de la Conquista. Le fascinaba conocer los pormenores históricos de las ruinas incaicas. Fue así que aprovechó su estadía en Cusco para visitar los distintos restos arqueológicos de la zona.
Luego de algunos años, se trasladó a Lima y se desempeñó como traductora de ciertos trabajos realizados por el arqueólogo norteamericano Paul Kosok. Estas investigaciones eran notas sobre unas líneas geométricas que podían visualizarse en la pampa de Nazca. En 1939, Kosok había descubierto lo que, posteriormente, se conocería como las líneas de Nazca, pero su conocimiento de ellas era aún muy incipiente. Él postulaba que había sido necesario un conocimiento matemático para poder trazarlas y que habían sido planificadas previamente a escala menor.
María Reiche quedó fascinada con esta teoría al tener acceso a las notas de Kosok y, en el año 1940, visita Ica por primera vez. Luego de algunos años se trasladaría definitivamente a Nazca para dedicar el resto de su vida al estudio de esta cultura. Se cuenta que Reiche recorrió las líneas a pie, con una cinta de medir, una escoba y una escalera de tijera. De ese modo subía y bajada para poder visualizar mejor el recorrido de las líneas. Posteriormente, removía la arena que cubría las líneas para permitir un mejor trazo del recorrido que estas seguían.
La labor de María Reiche fue muy significativa, no solo para el conocimiento y difusión de las líneas de Nazca, sino también para su preservación. Debido a que se empezó a difundir más acerca de este legado cultural, muchos curiosos y turistas empezaron a llegar a Nazca y se puso en riesgo la conservación de las líneas. En 1970, y en gran parte gracias a la labor de Reiche, el Instituto Nacional de Cultura declaró a las pampas como zona protegida.
María Reiche y las líneas de Nazca
Hoy en día, las figuras y líneas de Nazca son reconocidas como patrimonio de la humanidad. Las primeras consisten en una serie de figuras de gran extensión que solo pueden ser percibidas plenamente desde una vista elevada. Asimismo, son de distinto tipo, pues algunas tienen forma de planta, de figuras geométricas y otras son zoomorfas. Sin embargo, las líneas son más abundantes y extensas que las figuras. Estas miden cientos de metros de largo y pocos centímetros de ancho. Suelen recorrer distintas extensiones de terrenos y superficies, pero mantienen el trazo de una manera constante y uniforme, lo cual es sorprendente debido a la falta de utensilios y artefactos sofisticados de medición en dicha época.
Entre las figuras más conocidas está el pelícano, las manos, la ballena, el mono y la araña. Sin embargo, la figura de mayor tamaño es la de un pájaro, el cual mide, aproximadamente, 300 metros y el lagarto de 180 metros que tuvo que ser cortado para llevar a cabo la construcción de la carretera Panamericana Sur.
El aporte de María Reiche
Las investigaciones realizadas por esta experta alemana le llevaron a definir a las líneas de Nazca como el más grande calendario astronómico. Ella explicó que estas líneas eran utilizadas como un gran calendario solar y lunar. De este modo, se constituyen en una de las más extraordinarias evidencias del quehacer científico de los antiguos pobladores peruanos.
María Reiche posee dos publicaciones en las que se recoge lo más importante de todos los años de investigación que desarrolló en la zona de Nazca: “Los dibujos gigantescos en el suelo de las pampas de Nazca y Palpa. Descripción y ensayo de interpretación”, en 1949. Posteriormente, en 1993, cuando estaba ya anciana y aquejada por el mal de Parkinson, se publicó lo que sería su obra última en la que se reúnen una serie de artículos, manuscritos y diversos documentos producto de su larguísima investigación. El texto se tituló “Contribuciones a la Geometría y Astronomía en el Perú antiguo”.
María Reiche falleció el 8 de junio de 1998, no obstante, su aporte al conocimiento y difusión de la cultura prehispánica en el Perú ha dejado una obra y legado imborrable. Esperamos que esta biografía corta de Maria Reiche te haya resultado útil.
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